Soluciones acústicas para teatros

Es necesario un conocimiento de la respuesta de las salas y del por qué de esta respuesta. A pesar de todo, el desconocimiento de los fenómenos acústicos más elementales es generalizado e impide un aprovechamiento óptimo de los recursos disponibles. Así mismo, si bien en general no se puede construir un aislamiento acústico eficaz de una manera cómoda, barata y sencilla, como es la utilización de cortinas acústicas, es importante conocer los límites de los acondicionamientos y aislamientos, y sobretodo, saber si se necesita acondicionar o aislar.

En Telones Madisson tenemos nuestra sección específica para tratar de forma exclusiva y técnica los problemas de la acústica, en concreto nuestra especialidad es el acondicionamiento acústico de un teatro donde se necesita unir criterios acústicos y arquitectónicos con el objetivo de conseguir las condiciones acústicas idóneas para el tipo de actividad al que se destinará la sala.

De este modo podremos detectar y subsanar las anomalías acústicas en la fase previa a la construcción, evitando resultados no deseados y costes mayores. Según la actividad a la que se destinará la sala, los principales objetivos de acondicionamiento acústico son:

Teatros y salas de conferencias requieren que la inteligibilidad de la palabra sea muy buena en toda la zona de audiencia (correcta compresión del mensaje oral). Para ello es necesario que el nivel de sonido sea suficiente en todos los puntos de la sala.

Las formas de las superficies y los materiales que las revisten estarán determinadas por las necesidades de acondicionamiento acústico de cada auditorio, sabiendo que cada material tiene un coeficiente de absorción determinado, incluso ya existen proyectos en donde las propias paredes están compuestas por paneles reguladores del sonido. De este modo se podrán conseguir los objetivos de calidad acústica deseados, pero si el auditorio o teatro no está afinado, es porque realmente puede variar en cada momento los tiempos de reverberación, difracción, ecos y otras anomalías, que a priori son casi imperceptibles pero que en función de la asistencia de público y la temperatura ambiente pueden variar considerablemente la percepción del sonido.